Todo tiene un principio y un final. Y por fin, después de una década las películas de Harry Potter casi cierran ya el ciclo. Y digo lo de casi porque para el que no lo sepa la última, ultimísima película del chico con gafas no cierra el ciclo, sino que es un film que lo han partido en 2 partes. Ahora en el cine podemos disfrutar de la primera mitad del cierre de la saga. Se ve que la gallina de los huevos de oro del muchacho de Hogwarts se muere y hay que aprovechar todo lo posible.

¿Esta la última película a la altura del resto de la saga? Sin duda es una obra para amar u odiar. Los seguidores de la serie no acabaran defraudados, y el público en general la encontrara igual que los demás. ¿Entonces es la misma historia de siempre? Sí, siguiendo el hilo argumental de la novela homónima, pero introduciendo escenas románticas y pintorescas que entorpecen el discurrir de la historia, una historia de huidas continuas que se acaba convirtiendo en tediosa al no seguir la constante acción de las novelas. Claro, el director y guionistas tienen que sacar "escenas de relleno" para justificar las 2 películas.

A pesar de ello, esta muy bien realizada, y los personajes ya casi adultos, con unos efectos especiales acorde con los tiempos que corren. El terror se plasma en algunas escenas, y la magia del mundo de Rowling se percibe en cada esquina. Y es lo que tiene este mundo que ya ha encandilado a varias generaciones, lo que aún permanece en sus películas, a pesar de que el director y los guionistas se empeñen tanto en destruir. Lo bueno de todo (sí, todo tiene su parte positiva) es que, la oscuridad que tanto reinaba en la película esta mucho mejor conseguida. Ahora la fotografía esta mucho más conseguida sin tener que llenar todas las escenas de sombras y oscuridades incomodas al espectador como en la anterior película de la saga.

En resumidas cuentas, una buena película que te gustara, te sabrá a poco o que aborrecerás. El público es en esta ocasión el que decide.
 

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